lunes, 11 de abril de 2011

Carta desde la ventana

Te escribo esta carta, viendo desde mi cama el cerro verde, todo tupido. En las madrugadas cuando me despierto y entre abro la cortina las luces de las lámparas de la Cr 4ª no me dejan ver las montañas, y es mayor mi desdicha de encontrarme despierto a esa hora sin poder verlas, porque eso es lo que me pone un poquito feliz y esperanzado.

Yo creo que me será muy difícil si tengo que mudarme a una casa donde no pueda ver montañas, porque son como mi escape en la ciudad… Se escucha como un ruido de sirena que se está abriendo paso por la Cr 7ª, ira de sur a norte porque está ya el contraflujo… Cuantas cartas se abran enviado hace muchos años y no llegaron finalmente al destinatario? Si bien porque se perdieron en un barco, en una mula, o porque nunca se dio el paso firme del remitente hacia la empresa de mensajería, al esclavo, al corral del ave mensajera o hasta la computadora.

Tal vez leas mi carta… Le he agarrado pereza a los boleros, esos son taladros, ya no pongo nada de eso… Hoy mientras hacia mercado por los parlantes pusieron en la voz de Sole Gimenez esta tarde vi llover… Yo no sé si me extrañas o me engañas, solo sé que vi llover, vi gente correr y no estabas tú, juro que si hubiese estado lloviendo en ese momento te hubiese escrito eso en un msj, pero hoy ha hecho sol…

Aun me esta costando levantarme los domingos a hacer el desayuno, ya cuando ando al límite de tiempo para salir a correr a la ciclovía hago lo de siempre, unos Kellog’s con leche, pero le he agregado al menú un sanduchito, resulta que ahora si hago mercado, y camino entre las filas de cosas del supermercado y me siento entre anciano y evolucionado, esas cosas raras que me dan a mi por pensar.

Tal vez leas la carta y sientas que no te la estoy enviando, porque quizás no esperas que la envíe a ti, pero eso es un problema que está solo suscrito a ti, a tu decisión, por mucho tiempo no has querido ver las cosas y te das la espalda, y esta es otra oportunidad que tienes para hacerlo.

He olvidado un poco la vida que tenia al lado de Odín, son ya 6 meses. Desde ese entonces me ha dejado devastado el corazón con su ausencia, pero uno se va acostumbrando y va olvidando, y así nos pasa con el tiempo con absolutamente todo lo que alguna vez quisimos y ya no está…



2 comentarios:

  1. Me alegra saber que has decidido seguir publicando, pero me entristece pensar que sigues dedicando a la misma persona, aún así es un regalo poder leerte

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  2. Que regalo poder leerte, poder saberte y poder escucharte a travez de tus palabras, está es una carta un poco para todos aquellos que disfrutamos el placer y el absoluto regalo de tu compañí...

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